Crece la polémica nacional por ingreso de Canadá a guerra de Ucrania

EDITORIAL.- El país está completamente dividido entre los que creen que el Gobierno canadiense hizo bien al ingresar a la guerra en Ucrania en apoyo a las tropas internacionales desplegadas con el respaldo de Estados Unidos, para evitar la caída de un gobierno y la invasión rusa, y los que consideran que es un grave error que tropas canadienses ingresen a un conflicto armado que no les pertenece, en donde Rusia y Estados Unidos están midiendo fuerzas, porque en cualquier momento la nación puede quedar en medio de la guerra. Temor que también ha sido expresado por muchos políticos del país.

Hasta hora la decisión del gobierno de Harper de unirse a una misión militar en Ucrania, liderada por Estados Unidos, no ha contado con un gran apoyo popular en el país, porque muchos lo ven un grave riesgo el envío de los primeros 200 soldados canadienses, porque en poco tiempo pueden ser muchos más, si el conflicto se recrudece.

Por ahora el Gobierno ha dicho que los oficiales canadienses fueron enviados por dos años, pero como apoyo a las tropas ucranianas, para entrenar a lo que enfrentan a los grupos armados, y no para combatir, pero políticos en la oposición han manifestado que el Gobierno no podrá garantizar que nuestros soldados no ingresen directamente a la guerra, porque en cualquier momento pueden quedar en medio del conflicto armado y hacer parte de la lista de víctimas de esta lucha armada que ya deja centenares de muertos.

Para tranquilizar a los canadienses, el ministro de Defensa, Jason Kenney, dijo que los uniformados estarán desplegados a unos 1.300 kilómetros de los distritos donde están los combates en los cuales el ejército ucraniano intenta enfrentar a las fuerzas separatistas pro rusas que cuentan con el apoyo de Rusia.

Rusia por intermedio de su embajador en Canadá, ya ha manifestado su molestia por la participación de militares canadienses en este conflicto, dijo que es "contraproducente y deplorable", que Canadá dicidiera enviar tropa a esta guerra, cuando debía intentar arreglar el conflicto de Ucrania de manera diplomática.

Las tropas canadienses se unieron a un contingente de fuerzas armadas conjuntas de Estados Unidos e Inglaterra, que entrenan soldados ucranianos y tropas de la Guardia Nacional de este país, a los que les brindan además apoyo  en equipamiento y tecnología, para enfrentar a los pro-rusos en las zonas de mayor conflicto.

Expertos en temas internacionales creen que el ingreso de Canadá a esta guerra, va generar una mayor tensión entre Rusia y Canadá, que ya están enfrentados por otros problemas y otros conflictos armados.

Desde abril de 2014, los enfrentamientos en las provincias ruso parlantes del este de Ucrania han dejado unos 6 000 muertos, según datos de la Organización de las Naciones Unidas (ONU). Además, alrededor de 1,5 millones de personas se han visto obligadas a abandonar sus hogares.