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Extraña muerte de una mexicana luego de ser detenida en Vancouver

05 de Febrero de 2014 a las 13:31

Inmigrante supuestamente intentó suicidarse porque sería deportada y de acuerdo con declaraciones del personal de Consulado de México en Vancouver, Lucía Vega Jiménez, tenía mucho miedo de ser deportada a su país, debido a una “situación doméstica”, pero hay dudas sobre lo que realmente pasó en el centro de detención de inmigración.

VANCOUVER.- Un extraño caso que ha causado indignación entre la comunidad hispana en Vancouver, pero especialmente entre los mexicanos, rodea la trágica muerte de la ciudadana mexicana, Lucía Vega Jiménez, quien supuestamente se intentó ahorcar en una ducha del centro de detención del aeropuerto de la ciudad, cuando se realizaba todo el proceso para su deportación.

Del caso que apenas se están conociendo algunos detalles, pese a que ocurrió a finales del año pasado, se supo en gran parte gracias a la labor de la organización No One Is Illegal, que defiende a los inmigrantes, que dijo que la ciudadana mexicana trabajaba en un hotel y enviaba dinero para el sostenimiento de su familia en México, pero un día fue arrestada supuestamente porque intentó colarse en una estación del metro sin pagar el boleto de entrada.

Desde ese fatídico momento, que ocurrió el 1 de diciembre, la historia de esta mexicana empezó a marchar muy mal, porque fue llevada a un centro de detención, donde se comprobó que no estaba legalmente en el país, y después fue entregada a la Agencia Canadiense de Servicios Fronterizos, CBSA por sus siglas en inglés, que determinó su deportación inmediata, por lo que la trasladó a un centro especializado para deportaciones en el aeropuerto de Vancouver, de donde la inmigrante saldría expulsada del país, por violar las normas de inmigración.

En este lugar de retención, la mujer de 42 años fue hallada colgando de una ducha el pasado 20 de diciembre y aunque logró llegar a un hospital con vida, nunca se recuperó y murió el pasado 28 de diciembre, tan solo 3 días después de navidad, por lo que la noticia muy pocos la conocieron.

Según la organización que trabaja en pro de los inmigrantes y el relato de la hermana de la victima de este caso, la ciudadana mexicana murió después de ser desconectada de las máquinas que la mantenían viva en un hospital de la ciudad.

Según las investigaciones Vega Jiménez había solicitado refugio en Canadá pero le había sido negado, luego presentó una demanda de revisión judicial ante una Corte Federal, pero esta también fue desestimada, por lo que debió salir del país, pero regresó para quedarse sin un estatus legal.

De acuerdo con la CBSA, el caso de la ciudadana mexicana era conocido por el Gobierno de este país, que supo del arresto. Claudia Franco Hijuelos, la cónsul general de México, ratificó lo dicho por el Gobierno de Canadá, y dijo que representantes del consulado conversaron con la inmigrante varias veces, tanto en persona como por teléfono, para conocer de su caso y como la podían ayudar.

Sobre esta historia quedan muchas interrogantes, porque muchos no se explican porque la noticia sobre la muerte de esta ciudadana se da a conocer semanas después de la tragedia, además de los factores que la llevaron a tomar la decisión de suicidarse cuando se encontraba bajo la custodia de Migración Canadá.

Al respecto mediante un comunicado, la Agencia de servicios fronterizos de Canadá dijo que son "falsas" las acusaciones de que habrían intentado "ocultar la información" sobre este caso.

 

Ante la muerte de una de sus ciudadanas en territorio canadiense, la cónsul general de México en Vancouver, Claudia Franco, dijo a los medios de comunicación, "estamos indignados de que esto haya ocurrido", mientras la oficina de medicina legal de la provincia de Columbia-Británica anunció que se realizará una profunda investigación de todo lo que rodeo este caso.

 

Grupos de refugiados, inmigrantes, mexicanos, canadienses e incluso el cónsul general de México están exigiendo respuestas a Inmigración tras la muerte de Lucía Jiménez que estaba bajo la custodia de Canadá. En la foto algunas personas que protestaron en Vancouver.

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