¡No soy racista…! dice el Ministro de Migración de Canadá

Organizaciones acusan a Jason Kenney de hipócrita y racista. Activista defensor de los derechos de los inmigrantes le recordó al Ministro el caso de Verónica Castro, una latinoamericana que fue deportada a su país y cinco semanas después de llegar a México fue golpeada hasta la muerte, todo porque Canadá le negó su protección.

VANCOUVER.- En el país crece el inconformismo por las nuevas medidas de migración, especialmente entre las organizaciones defensoras de los inmigrantes y trabajadores temporales, que han acusado al Ministro de Ciudadanía e Inmigración, Jason Kenney de crear leyes racistas, como la de quitarle la salud a los refugiados, bajar aceptación de refugiados y limitar la entrada a personas que no tienen como primera lengua el ingles o el francés, porque ahora será fundamental saber el uno de los dos idiomas.

La situación ya generó varias marchas de protestas contra Kenney, quien salió a defenderse de las acusaciones y dijo que su política migratoria no es racista y que estas solo buscan parar el "abuso de la generosidad de Canadá".

"Una cosa que es única acerca de Canadá, es la única democracia en el mundo desarrollado en el que no hay sentimientos anti-inmigrante o xenófobos", dijo el Ministro, quien agregó en Columbia Británica y agregó “yo quiero que siga siendo así”.

Según Kenney a él le tocó hacer lo que muchos querían que se hiciera en migración y por eso es el malo por decir que no a mucho inmigrantes, porque según él Canadá no puede seguir recibiendo a todo el mundo, "voy a ser franco con ustedes: Porque el gobierno y los políticos no quería correr ningún riesgo, no querían ser acusados de acabar con la tradición canadiense de la inmigración, nadie estaba dispuesto a abordar los problemas que todos sabemos que existen en nuestro sistema... ¿Por qué? Debido a que los canadienses son muy educados! No nos gusta decir que no a nadie. Hay un número infinito de personas en todo el mundo a quienes les encantaría venir y buscar oportunidades en Canadá”, manifestó Kenney.

Para los activistas que defienden a los inmigrantes lo que dice el Ministro es insultante con el país, con la filosofía canadiense y con sus principios, por lo que acusaron a Kenney de hipócrita y le recordaron casos como el de Verónica Castro, que fue deportada a su país y cinco semanas después de llegar a México fue golpeada hasta la muerte, todo porque Canadá le negó su protección.

"Estamos hablando de inmigrantes que vienen aquí, gente de color que son explotados en el trabajo y que luego los sacan, o que no pueden traer sus parejas, que no tienen acceso a la atención de la salud. Tengo curiosidad por saben sí eso no es xenófobo ", dijo Lee Williams, un miembro de la organización migrante justicia Nadie es Ilegal.

A Williams y otros activistas defensores de inmigrantes les fue supuestamente impedido el ingreso al evento en donde el Ministro daba su discurso sobre los cambios en Migración, los organizadores negaron ello, pero varias personas que protestaban contra Kenney en la entrada del hotel fueron arrestadas.

Para los líderes de las organizaciones defensoras de los inmigrantes, el Ministro se caracteriza por ser de línea dura y extremista y como ejemplo dieron a conocer como la nueva ley sobre matrimonios entre canadienses y extranjeros servirá para que muchas mujeres o hombres sean esclavizados, porque tendrán una residencia condicionada, que la esposa o el esposo pueden suspender si les provoca, lo que facilitará los abusos contra los inmigrantes.

El Ministro dijo que esos casos de maltrato y abuso serán investigados y que los inmigrantes podrán hacer las denuncias, pero que no puede seguir permitiendo que se sigan realizando matrimonios falsos, por dinero y que se sigan engañando a mucho canadienses, solo para obtener una residencia en Canadá. Para Kenney sus reformas ayudarán a proteger a Canadá y a los canadienses para que no se aprovechen de ellos.