Nuevos cambios propuestos en las leyes para refugiados en Canadá

Por Angélica González Blanco

TORONTO.- El primer ministro Justin Trudeau está defendiendo los controvertidos cambios a las leyes de asilo político más conocido popularmente como refugio, en estos días introdujo un proyecto de ley en el que manifiesta que su gobierno quiere asegurarse de que el sistema de refugiados de Canadá sea justo para todos.

Los cambios evitarían que los solicitantes de asilo presenten solicitudes de refugio en Canadá si ya presentaron previamente solicitudes similares en otros países, incluido Estados Unidos, un movimiento que el Ministro de Seguridad Fronteriza Bill Blair dice que tiene como objetivo evitar las "compras de asilo". Cosa que veo un poco controversial, ya que en la ley actual existe la imposibilidad de pedir asilo político en Canadá si ya había sido otorgado por otra país, el tenor de la reforma se refiere a la simple solicitud sin respuesta a mi parecer.

Los abogados y defensores que trabajan con los refugiados sonaron la alarma acerca de los cambios legales, diciendo que quitarían la protección de los derechos humanos a los solicitantes de asilo vulnerables aquellos que son desechados por sistemas tan caprichosos como el estadunidense se quedaran sin ese derecho emanado de la convención del refugiado firmado en 1951

Más de 41,000 solicitantes de asilo han cruzado a Canadá "irregularmente" a través de caminos no oficiales en la frontera entre Canadá y Estados Unidos desde principios de 2017. Al hacerlo, aprovechan una falla en el sistema en el "Acuerdo del tercer país " de Canadá con los Estados Unidos que permite a los refugiados que encuentran un camino hacia Canadá evitando los puestos de control fronterizos oficiales para hacer reclamos de refugiados. De lo contrario, el acuerdo los vería regresar a los EE. UU., un país que Canadá considera seguro para ellos.

El influjo de migrantes irregulares comenzó después de que el presidente de los Estados Unidos, Donald Trump, anunciara que finalizaría un programa que ofrece un estado de protección temporal a los migrantes de varios países, notificando que buscaría devolverlos a sus países de origen que

Estados Unidos había considerado anteriormente como demasiado peligrosos. Se ha convertido en un tema político difícil para el gobierno de Trudeau ya que cientos de migrantes continúan llegando a Canadá a través de un cruce no oficial en Quebec cada mes.

Las cifras del gobierno muestran que desde el 1ro de abril de 2017, aproximadamente 3,150 solicitantes de asilo en Canadá habían solicitado previamente asilo en los Estados Unidos. Tres cuartas partes de ellos eran migrantes irregulares: menos del seis por ciento del número total de solicitantes de asilo irregulares que llegaron a Canadá desde 2017. La gran mayoría de ellos hizo sus reclamaciones a los Estados Unidos entre uno y cinco años atrás, según a los datos del gobierno.

Los liberales señalaron su intención de endurecerse en la frontera con el presupuesto de 2019, que incluía un plan para gastar $ 1.18 mil millones durante cinco años para reforzar la seguridad y la aplicación de la ley y acelerar el procesamiento de las solicitudes de asilo.

El ministro de finanzas, Bill Morneau, dijo que Canadá quiere mantener su reputación como un país justo y acogedor, pero también uno que se rige por el estado de derecho.

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