Parejas de canadienses con extranjeros exigen mayor rapidez de Migración.

Protestas en Ottawa por demora en proceso de residencia. 

La situación es tan delicada que esposas y esposos, y familias completas de afectados, realizaron una protesta frente al edificio de Ciudadanía e Inmigración de Canadá en Ottawa, molestos por la cantidad de tiempo que toma que el cónyuge, no canadiense, obtenga un estatus en este país, que les permita trabajar y tener servicio de salud.

OTTAWA.- Alrededor de 10.000 parejas conformadas por un o una canadiense y un extranjero o extranjera, algunos ya con hijos, están a la espera que el Gobierno les legalice la situación migratoria de su compañero o compañera que se encuentran fuera o dentro de Canadá, porque las demoras en el proceso están obligando a muchos de ellos a estar separados, o están en peligro de ser separados, a lo que se suma el problema de no contar con los permisos de trabajo y el servicio de salud.

Para muchas parejas el gran problema es que los procesos son muy lentos, según algunos expertos en el tema en promedio más de 25 meses, pero algunos llevan años esperando dependiendo del país de origen del inmigrante, tanto tiempo que hay casos en que les piden a las parejas que fueron conformadas dentro de Canadá, que hasta ya tiene hijos, que salgan del país, que se separen los dos por un tiempo mientras se realiza el proceso, algo que muchos no están dispuestos a realizar, especialmente porque muchos creen que es un atentado contra la familia, especialmente cuando ya hay hijos de por medio que deben quedar al cuidado de una de las dos partes, dentro o fuera de Canadá.

La situación es tan problemática que cansados de esperar esposas y esposos de extranjeros, algunos con toda la familia realizaron una marcha de protesta en Ottawa para exigir al Gobierno una mayor agilidad en los procesos, o al menos que les otorgue a sus cónyuges el permiso de trabajo que se requiere mientras llega la residencia permanente, tal como se les da a los estudiantes extranjeros y a los solicitantes de refugio, que solo deben esperar unos días para obtener estos documentos, mientras ellos tienen que esperar años.

Muchas de las parejas afectadas están en un limbo jurídico que impide que sus compañeros o compañeras puedan trabajar aun estando en el país, lo que genera que los pocos ahorros con que cuentan un canadiense se debe invertir en mantener a su compañero o compañera. A esto agréguele que la persona no puede salir de Canadá, por cualquier motivo, porque corre el riesgo de ser rechazados en la frontera a su regreso.

Los canadienses que deben enfrentar este problema están pidiendo al Primer Ministro Stephen Harper, que les ayude en la agilización del estatus migratorio, o que les permita al menos que sus cónyuges puedan trabajar y tener servicios de salud transitorios dentro de Canadá, mientras llega la residencia.

Los manifestantes pidieron ser recibidos por el ministro de Ciudadanía e Inmigración de Canadá, el Secretario del Parlamento o un representante del Gobierno para que escucharan sus quejas y como la lentitud de Migración los está afectando, pero no fueron recibidos por ninguna entidad gubernamental implicada en estos procesos.

Sobre los retrasos en estos procesos Migración Canadá ha dicho que hace dos años se puso en marcha lo que denomina el Plan de Acción para Faster Reunificación Familiar, con el objetivo de reducir el atraso de los solicitantes y que según ellos es todo un éxito porque el tiempo de espera se redujo hasta en un 50%, pero las personas afectadas dicen que está pasando lo apuesto y que en los últimos años ha aumentado el tiempo de espera.