Crece el temor en Venezuela por lo que puede pasar en las elecciones

El Chavismo y Maduro, saben que están en riesgo de perder el control de Venezuela.

El temor crece en Venezuela, ante las elecciones legislativas previstas el próximo domingo 6 de diciembre, pero los opositores incentivan a los venezolanos a salir a votar por el cambio y enfrentar la campaña del miedo iniciada por el Gobierno, cuyo Presidente Nicolás Maduro en varias ocasiones ha lanzado claras advertencia sobre si es derrotado.
 

CARACAS.- El mundo tiene esta semana los ojos puestos sobre Venezuela y lo que puede pasar en las elecciones del próximo domingo, en el que podrán participar más de 19 millones de venezolanos. Será un momento histórico, que podría generar un gran cambio en el poder legislativo, si los opositores a Maduro logran ganar, pero eso puede conllevar también a un fuerte enfrentamiento entre los venezolanos, si el Gobierno no acepta los resultados de la votación, si le son contrarios o se demuestra algún tipo de fraude.
 

El presidente del Parlamento venezolano, y también candidato chavista, Diosdado Cabello, dijo este martes que si el oficialismo no gana la mayoría de los escaños en esos comicios, habrá un “conflicto de poderes” porque el jefe de Estado, Nicolás Maduro, “no se va a dejar”. Realmente es un duró momento con mucha tensión, miedo y zozobra, por lo que puede pasar, especialmente por las declaraciones polémicas del Presidente Nicolás Maduro, que no ha dejado muy claro si aceptará el resultado, pero además por los ataques que han sufrido los candidatos de la oposición y porque muchos venezolanos, organizaciones del mundo y hasta presidentes de otras naciones, dicen que no están dadas las condiciones para que el proceso electoral sea totalmente trasparente, y un fraude a estas alturas, y con el grado de confrontación existente, podría desatar un choque entre ambos grupos políticos, que es el verdadero temor que tienen los venezolanos.
 

Por ahora para la oposición, las encuestas, y en sentir en las calles de Venezuela, es que ellos van a ganar sin mayores problemas, porque hay una gran ventaja en la intención de voto, a una semana de las elecciones parlamentarias, pero el Gobierno afirma que son ellos los que ganarán las elecciones legislativas, lo que está generando ese clima de violencia verbal política, que ya está generando muertos y que nadie quiere.
 

La batalla por el poder de Venezuela tiene en alto riesgo al Gobierno chavista que después de casi 20 años podría quedar sin el control del poder legislativo, del poder de donde han salidos gran parte de las leyes, normas y reglas con el que Maduro, y anteriormente Chávez, lograron imponer sus ideas y sus programas de gobierno, con el que muchos ahora no están de acuerdo.
 

Después de 17 años, la oposición, representada en su gran mayoría por la Mesa de la Unidad Democrática (MUD), llega con una opción real de ganar, en gran parte por los errores cometidos por el actual Presidente Nicolás Maduro, que no ha logrado salir delante de varios problemas que enfrenta al país, como una alta inflación, el desabastecimiento de muchos artículos, y el crecimiento de la delincuencia, entre otros.
 

Desde la época de Chávez, nunca el gobierno llegó al nivel de impopularidad que enfrenta Maduro actualmente, algo que seguramente se verá reflejado en los votos., especialmente porque gran parte de los venezolanos, incluidos muchos chavistas lo responsabilizan del mal manejo económico y el colapso de un modelo económico montado por su antecesor que no se pudo sostener ante la caída del precio internacional del petróleo y los gastos excesivos del estado.
 

Analistas internacionales de varios medios creen que es muy probable que la diferencia en la votación no sea tan grande como muchos esperan y que el triunfo de la oposición no sea tan contundente, porque hay muchas personas que depende laboralmente del Gobierno, y hay muchos interesados a que el chavismo se siga sosteniendo en el poder, pero además por el miedo que existe en las calles que podría generar que muchas personas no salgan a votar.