Enfrentamiento legal impiden dar al servicio nuevo tramo de una autopista de Toronto

Provincia afirma que la 427 quedó con problemas de seguridad, constructora dice que esta lista

TORONTO. - La extensión de la autopista 427, que se debió dar la servicio hace más de 6 meses, y que tuvo un costo cercano a los $616 millones, aun esta sin usar por una disputa legal entre el gobierno de Ontario y el consorcio privado contratado para construirla.

A simple vista, la extensión parece completa: los carriles están pintados, las señales de tráfico están levantadas. Se han construido puentes y rampas, y ya se instalan hasta los semáforos. Pero el gobierno provincial le ha dicho que la carretera, construida como parte de una asociación público-privada, no puede abrirse debido a preocupaciones de seguridad.

El consorcio, LINK427, lo niega. En una demanda presentada esta semana, acusa al gobierno de paralizar la apertura de la extensión para que pueda retrasar el pago al consorcio de más de $144 millones que se le deben.

Según la demanda, que no ha sido probada en los tribunales, el consorcio y la provincia están envueltos en otras batallas que involucran cantidades no especificadas de dinero por trabajos adicionales realizados en el proyecto, pero no pagados.

El proceso para resolver esas disputas no puede comenzar hasta después de que se abra la ampliación de la carretera y la provincia haga el pago final del contrato de $144 millones a LINK427.