Harper sigue prometiendo cosas como gancho electoral para ganar elecciones en octubre.

Créditos de vivienda e ingreso de refugiados Sirios hacen parte de promesas de campaña. La promesa de permitir usar más recursos a los canadienses del RRSPs le costaría al gobierno $ 30 millones al año en ingresos fiscales a la Nación, pero ayudaría a muchas familias a tener casa propia, que deben pagar una multa, cuando la cifra supera los $25 mil dólares.
 

OTTAWA.- El Primer Ministro Stephen Harper se comprometió a elevar la cantidad de dinero que los ahorradores pueden extraer de sus RRSPs para comprar una casa, que pasaría de $ 25.000 a $ 35.000 dólares, si es elegido.
 

La promesas de Harper siguen creciendo mientras sus opositores cuestionan la trasparencia en su intento de ganar votos para su partido en el país, precisamente cuando los conservadores están perdiendo gran partes de las encuestas.
 

En un acto de campaña en Vancouver, Harper dijo que un gobierno conservador aumentaría el límite superior de lo que se conoce como Plan del comprador de la vivienda. Bajo las reglas actuales, un posible comprador puede retirar hasta $ 25,000 de su RRSP sin pagar una multa, siempre y cuando el dinero se utilizará para ayudar a pagar la primera vivienda. Bajo la nueva propuesta conservador, ese límite se incrementaría a $ 35.000.
 

"Para la mayoría de los canadienses, la casa de la familia es su mayor activo y su inversión más importante en su futura seguridad financiera. También es el centro de sus vidas", dijo Harper.
 

Dado que el plan se inició en 1992, más de 2,8 millones de canadienses han utilizado el plan para ayudar a pagar por una primera vivienda, la Asociación Inmobiliaria de Canadá, que representa a los agentes inmobiliarios en todo el país, dijo en un comunicado después de la promesa de la política. Harper también se comprometió a revisar el ingreso de capitales extranjeros que han generado un gran aumento del costo de las viviendas en Canadá, especialmente en Toronto y Vancouver, algo que muchas personas estaban pidiendo desde hace años.
 

"Estamos anunciando que nuestro gobierno se comprometerá a la recogida de datos sobre la actividad comprador extranjero en el mercado de la vivienda de Canadá. Vamos a tomar medidas en coordinación con las provincias, según sea necesario, para garantizar la inversión extranjera en el sector de la vivienda de Canadá aumenta la disponibilidad y asequibilidad de casas para los canadienses”. Según cifras alrededor del 15 por ciento de los condominios en Vancouver que son comprados por extranjeros están desocupados, porque los inversionistas esperan a un año a que suba su precio.
 

Por otro lado el primer ministro canadiense, Stephen Harper, prometió que permitirá la entrada en el país de 10.000 refugiados sirios, si gana en las elecciones generales del 19 de octubre. Harper, de Partido Conservador, ya había prometido en enero de este año que Canadá iba a abrir las puertas a 10.000 sirios y antes había hecho otras promesas similares, lo que sitúa en unos 23.000 la cifra de sirios que desde 2013 se ha comprometido a acoger.
 

El principal partido de la oposición, el socialdemócrata Nuevo Partido Democrático (NPD), recordó que Harper incumplió la promesa inicial que realizó en 2013, por la que Canadá iba a recibir 1.300 refugiados sirios para finales de 2014. Durante meses el Gobierno de Harper se negó a revelar el número de refugiados procedentes de Siria aceptados por Canadá desde 2013, a pesar de las críticas de organizaciones humanitarias y de las propias Naciones Unidas.
 

Hoy Harper afirmó que Canadá ha aceptado 2.500 refugiados, aunque las autoridades canadienses se han negado a ofrecer detalles que avalen la veracidad de la información. Según los datos de la ONU, algo más de 4 millones de sirios han sido desplazados por la guerra a países de la región. La Unión Europea (UE) ha aceptado un total de 311.349 refugiados sirios en sus fronteras.
 

Alemania y Suecia son los países que más refugiados han adoptado: casi 90.000 el primero y 62.000 el segundo. España ha recibido algo más de 5.000. También a finales del año pasado se supo que Canadá estaba favoreciendo la llegada al país de refugiados de origen cristiano a pesar de que la inmensa mayoría de los desplazados por la guerra civil son musulmanes.