Por altos costos en la ciudad, 14 hogares para ancianos se marcharían de Toronto

1.800 adultos mayores se verían afectados por la medida 

Del total de estos centros asistenciales en Toronto, solo seis han señalado su intención de reconstruir los nuevos centros de asistencia dentro de la ciudad para las personas de la tercera edad como los exige el Gobierno que les dio plazo hasta el 2025 para hacerlo, la gran mayoría amenza con irse de la ciudad, porque los altos costos de la tierra y construcción no les permite adelantar los proyectos. El Alcalde le pide a la provincia que aumente los subsidios. Cabe señalar que el Ministerio de Salud tendrá la última palabra sobre si se permitirá la reubicación de las instalaciones existentes.

 TORONTO.- Canadá se prepara para enfrentar un gran problema en el año 2025, el gran envejecimiento de su población, cuando se cree que necesitara una gran numero de nuevos centros asistenciales especialmente diseñados, con los mejores estándares de calidad para atender a los que se van a retirar, pero al parecer Toronto, la ciudad más poblada del país, se quedará sin estas edificaciones, porque las empresas que están al frente de estos establecimientos, dicen que no pueden cumplir con las exigencias, porque es muy costoso construir en la ciudad por lo que prefieren salirse de Toronto.

El alcalde John Tory ha dicho que para evitar que estas empresas se muden y el problema que se puede generar en la ciudad, la provincia debería aumentar el subsidio otorgado a los hogares que cuidan a las personas de la tercera edad, para que se puedan construir las nuevas edificaciones con los estándares exigidos, dentro de la ciudad, y no fuera de ella.

En Toronto hay una gran necesidad de construir centros asistenciales de largo plazo, donde viven personas mayores, pero contrariamente gran parte de las empresas responsables de adelantar estos proyectos ya han amenazado al Gobierno Provincial y a la Municipalidad, no solo con no construir nuevas instalaciones, sino además de mudar sus operaciones a otras ciudades, por los altos costos que representa adelantar los proyectos como lo exige la norma.

Bajo una estrecha vigilancia la provincia ha otorgado a todos los hogares para ancianos en la ciudad la responsabilidad de atender a esta población hasta el año 2025, bajo la advertencia que deben mejorar las instalaciones. Si estas compañías no cumplen con los estándares que se diseñaron para mejorar el servicio, el Gobierno les quitará el respaldo económico. Para evitar que esto pase, las empresas deberán construir entre 20 y 36 instalaciones nuevas para reemplazar las existentes, antes de cumplirse el plazo, pero las compañías aseguran que con los precios actuales de la construcción y de la tierra en Toronto les será imposible cumplir lo que les exigen.

Bajo los estándares trazados para estos centros asistenciales, las empresas que atienden a los adultos mayores en la ciudad se deberán modernizar sus instalaciones para continuar operando, pero muchas de estas compañías han anunciado que para cumplir con lo especificado se tendría que ir de Toronto, para poder bajar costos.

La Red de Integración de Salud Local de Toronto (LHIN por sus siglas en ingles), informó al Gobierno provincial que 8 empresas ya anunciaron que se van de Toronto, con sus 1.270 camas, y otras 6 están en el proceso de abandonar la ciudad, sino encuentran lugares adecuados para construir las nuevas edificaciones, solo 6 han anunciado que construirán las nuevas edificaciones, como lo exige las normas.  

Candace Chartier, directora general de Ontario Long Term Care Association, dijo que el gran problema es el precio de la tierra en Toronto que no permite adelantar los proyectos porque eleva demasiado los costos. Dijo que las empresas están tratando de encontrar instalaciones para adecuarlas, porque no se quieren ir de la ciudad, pero es difícil, por la cantidad de camas para adultos mayores que se requieren.

El Toronto Central LHIN ha dicho que su personal se reunirá con representantes del Ministerio de Salud, para informarles el riesgo que corre la ciudad de quedarse sin estos centros asistenciales, y de las alternativas que existen para solucionar el problema de atención de adultos mayores a largo plazo.

Expertos dicen que ante la disminución de la población infantil, mientras crece la de adultos mayores, hay en la ciudad varios terrenos escolares vacíos que podrían ser utilizados para este fin, pero aún no hay luz verde para utilizarlos.