Por evitar avance de la pandemia, Argentina se hunde aún más económicamente

Gobierno mantiene el cierre de empresas, fuertes medidas de control y la cuarentena

La rápida depreciación del peso frente al dólar, una inflación desbocada y elevadas tasas de interés castigaron con dureza a todo el aparato productivo argentino. La cuarentena le ha asestado ahora un golpe mucho mayor.

BUENOS AIRES.- Argentina es uno de los pocos países en el mundo que aún mantiene fuertes restricciones a sus residentes para evitar el avance de la pandemia y especialmente sobre as empresas, medidas que han dado buenos resultados para detener el crecimiento exponencial de contagios en gran parte del territorio nacional, pero no en Buenos Aires, pero que además está produciendo una quiebra de la industria, en una nación que arrastra una fuerte crisis económica desde hace varios años.

 Durante abril, las fábricas y las obras en construcción a lo largo de toda Argentina permanecieron cerradas por la cuarentena impuesta para frenar la expansión de la covid-19. El resultado fue un desplome sin precedentes: la industria cayó el mes pasado un 33,5% interanual y la construcción un 75,6%, según los datos difundidos por el Indec, el organismo oficial de estadísticas.

Los diez días de freno de marzo y los treinta de abril hundieron todo el primer cuatrimestre del año, con una caída acumulada de la construcción del 40,2% respecto al mismo periodo de un año antes.

Bajo estrictos protocolos sanitarios, el Gobierno de Alberto Fernández comenzó a flexibilizar algunos sectores, como el automotriz, a partir de mediados de mayo. Las cifras de abril reflejan el período más duro, en el que la economía paralizada tocó fondo.

Hasta el sector de los alimentos, el único que se ha mantenido a toda máquina durante la cuarentena, cayó un 2%. La bajada, sin embargo, permitió ajustar el promedio general, porque a otros les ha ido mucho peor en el balance interanual: automóviles se derrumbó un 87,9%, vestimenta un 72,2%, productos metalmecánicos casi un 55% y equipos electrónicos más de 75%. El efecto de la cuarentena ha sido devastador en toda la cadena.

El cierre de fronteras, la cancelación del transporte interjurisdiccional y el aislamiento preventivo han logrado contener el coronavirus en gran parte del país, pero no en Buenos Aires y su área metropolitana, donde se concentra el grueso de la actividad industrial argentina. En esa región se registran cerca del 90% de los nuevos contagios y los números van en ascenso, por lo que nadie sabe cuándo se va a levantar la cuarentena, que se extenderá por tres semanas más a partir del lunes. El Gobierno ha permitido la apertura gradual de ciertas actividades, pero la recesión generalizada que tenía Argentina antes de la pandemia hace suponer que la recuperación será lenta.

El horizonte es sombrío. La pandemia ha agravado la recesión que el país sudamericano arrastra desde 2018. Ese año, su PIB retrocedió un 2,5% y en 2019 un 2,2%. Los números rojos empeorarán este año, en sintonía con la crisis global provocada por la covid-19. A mediados de abril, el Fondo Monetario Internacional, principal acreedor de Argentina, estimó que el PIB del país sudamericano se contraerá cerca del 6%.