Trágica muerte de 10 inmigrantes encerrados en un camión en Texas

Gran parte de las víctimas son mexicanos que pagaron $5.500 para llegar a EE.UU. 

En un furgón en el que viajaban apeñuscadas alrededor de 100 personas, de los cuales algunos eran niños, la policía de EE.UU.,  encontró a 10 inmigrantes muertos, dos de ellos menores de edad. Todo indica que se trata de un caso de tráfico de personas. El conductor de la mula fue acusado de transporte ilegal de inmigrantes, con el agravante de haber causado 10 muertes, por lo que puede enfrentar la pena de muerte.

TEXAS.- Les prometieron que por cinco mil 500 dólares los llevarían hasta Estados Unidos, en un camión especial con aire acondicionado, pero luego de subir al vehículo empezó la tragedia para unas 100 personas, porque dentro del oscuro remolque de metal no había suficiente aire para respirar y mucho menos ventilación. Los indocumentados que sobrevivieron relataron que en su viaje tuvieron que turnarse para respirar por un orificio del furgón, porque el camión era un verdadero horno mortal. El saldo de la tragedia deja por ahora 10 personas muertas, dos de ellos niños, y alrededor de 30 personas heridas, o con graves lesiones.

Aunque la Policía solo ha reportado que en el caso hay involucrados unos 50 inmigrantes, según las denuncia de algunos de sobrevivientes, realmente en la parte trasera del camión viajaban más de 100 personas, algunas de la cuales lograron escapar.

Según las investigaciones los inmigrantes viajaban apeñuscadas en el camión fue encontrado a las afueras de las tiendas Walmart, donde un empleado alertó a las autoridades de que algo extraño estaba pasando en el interior del pesado vehículo, porque vio como una persona salía suplicando para que le dieran un poco agua.

Autoridades de inmigración confirmaron a los medios de comunicación que tras el hallazgo del camión lleno de inmigrantes aparcado en un Walmart de San Antonio, Texas, en la madrugada del sábado al domingo, habían 38 personas, y luego encontraron otra persona más a pocas cuadras del lugar en estado muy lamentable.

Por ahora las autoridades estadounidenses imputaron al conductor del camión por el delito de transportar inmigrantes indocumentados, informó la Fiscalía, pero James Bradley Jr., de 60 años y originario del estado de Florida, puede enfrentar cadena perpetua o la pena de muerte por llevar migrantes apilados y al borde de la muerte.

Según el relato de uno de los sobrevivientes,  entre los inmigrantes se encontraban algunos niños que se escucharon llorar durante todo el viaje suplicando que les dieran agua.  Dijo además que durante la primera hora de viaje, todos parecían estar bien, pero después, varios comenzaron a tener problemas para respirar y algunos se desmayaron, por lo que comenzaron a golpear las paredes del tráiler y hacer ruido para llamar la atención del chofer, al que nunca le vieron la cara.

Hasta hora se sabe que por lo menos entre las víctimas hay dos "niños en edad escolar" y el resto de los muertos son personas entre  20 y 30 años, que murieron asfixiadas o por deshidratación, por el insoportable calor que se registró al interior del vehículo que no contaba con ventilación, porque es un camión para llevar carga refrigerada.

De los sobrevivientes se ha podido establecer que varios quedaron seriamente afectados y fueron trasladados a hospitales en Texas, otros presentaban daños menores incluidos golpes que recibieron por los movimientos bruscos del vehículo y otros están fuera de peligro, y ahora se enfrentan a la deportación.