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La importancia del uso correcto del tapabocas para no contagiarse o dispersar el virus

05 de Octubre de 2020 a las 12:32

La importancia del uso correcto del tapabocas para no contagiarse o dispersar el virus  En muchos países se esta imponiendo el uso obligatorio de mascarillas, incluso en espacios al aire libre

Utilizar una máscara, barbijo o tapabocas, que realmente tapen boca y nariz, que se ajuste bien y no se caiga, usándolo siempre cerca de otras personas o en lugares cerrados, incluso en espacios al aire libre si está a menos de 3 metros de otra persona, evita realmente que el virus se disperse con facilidad, especialmente si todos la usan correctamente, porque será muy baja cantidad de partículas virales en el aire. Se puede sacar el tapaboca, si estás en casa, o en un lugar al aire libre, pero muy lejos de otras personas, recuerde que el virus viaja por el aire.

LONDRES. – El Covid-19 llegó para quedarse por un largo tiempo, la pandemia sigue aumentando, los muertos y los contagiados se disparan incluso en países que pensaron que ya había pasado lo peor, por ello los especialistas están pidiendo al mundo el uso adecuado del tapaboca, un elemento de bioseguridad mediante el cual se ha podido comprobar evita esparcir al aire las partículas que llevan el virus y que fácilmente pueden llegar a otra persona.

En un espacio cerrado si todos los llevan puesto, las posibilidades de un contagio son mínimas, porque la mascarilla proporcionar una capa adicional que ayude a evitar que las secreciones respiratorias de una persona viajen por el aire y puedan llegar a otras, que tendrán una protección extra si llevan puesto el tapabocas de manera correcta.

La Organización Mundial de la Salud (OMS) está pidiendo a todo el mundo el uso de cubrebocas para prevenir la propagación del coronavirus, pero hay que hacerlo de manera correcta, porque así se evita que se propague el Covid-19 a través de las gotitas respiratorias que salen al aire cuando una persona tose, estornuda o habla. Las mascarillas son de gran importancia para evitar que siga creciendo la pandemia, pero si cubren bien la boca y la nariz.

De acuerdo al Centro para el Control y la Prevención de Enfermedades de Estados Unidos (CDC, por sus siglas en inglés), una mascarilla bien puesta puede proteger a una persona incluso mejor que una vacuna. “Tenemos evidencia científica clara de que funcionan y son nuestra mejor defensa”, dijo el doctor Robert Redfield, director de los CDC. "Incluso podría llegar a decir que esta mascarilla tiene más garantías de protegerme contra el COVID-19 que ponerme la vacuna". Cabe aclarar que la mejor vacuna solo logra proteger en un 70 por ciento a una persona.

Bajo este criterio, el CDC autoridad sanitaria de Estados Unidos elaboró una guía que ayuda a clasificar los tipos de mascarillas y como debe ser su uso:

  1. Respiradores N95: Diseñados para reducir la exposición a partículas grandes y pequeñas, se ajustan individualmente al usuario para garantizar un sellado adecuado alrededor de la nariz y la boca. Cuando se usa y se coloca correctamente, hay una fuga mínima cuando el usuario inhala.
    Mascarillas médicas: Incluyen quirúrgicas, de procedimientos y de atención al paciente. Están diseñadas para proteger al usuario de los fluidos corporales y de las secreciones respiratorias del infectado, y viceversa. Su principal característica es que son de menor ajuste, las cuales brindan una protección del 60 al 70% y deben ser usadas por personas que desarrollan actividades de riesgo medio a alto.
  2. Mascarillas de distanciamiento social: Incluye cualquier cubierta facial de tela, reutilizable y no médica, destinada a ser usada por el público en general u otras personas en las categorías de exposición de riesgo bajo a medio, para proporcionar una barrera entre el usuario y otros.

Las mascarillas son personales y no se pueden compartir. Las mascarillas no se deben poner con las manos sucias. Antes de quitar, poner o ajustarse se deben tener las manos limpias. No la uses si no es reutilizable. Si es reutilizable, lávala con agua y jabón y deja que se seque. Lávalas tras cada uso. Deséchalo: Si no presentas síntomas de contagio, corta tu cubrebocas y deposítalo en un contenedor que indique "desecho médico". 

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