Se requiere una solución urgente al grave problema de vivienda en Toronto

Los precios de las casas, los apartamentos, para comprar o para rentar en todo el GTA están por las nubes y lo peor es que no se consiguen. Todo indica que la situación del grave problema va a empeorar, tanto para los nuevos residentes y como para los viejos habitantes de la gran metrópolis de Canadá que aún no han comprado, porque ya ni a las afueras se consiguen precios razonables. Por ahora tanto el Alcalde de Toronto como el Gobierno Federal han anunciado planes y la construcción de viviendas a bajo precio, pero esas casas no se verán por ahora, mientras la demanda sigue creciendo a un ritmo muy superior a la oferta.

EDITORIAL.-  Conseguir un lugar digno para vivir en Toronto, le puede salir costando alrededor del millón de dólares, si es una casa para la compra; de 500 a 800 mil si es un apartamento y de más de 1.500 para arriba si es para rentar un lugar de una o dos habitaciones, y no espere por esos precios mansiones o lujosos apartamentos, que podrían encontrar con ese presupuesto en otras ciudades del mundo, serán propiedades pequeñas, algunas muy viejas y en el mejor de los casos bien localizadas, porque el gran problema del GTA, es que se quedó sin lugares para que sus residentes puedan vivir y ni que hablar de los inmigrantes que están llegando, que deben enfrentarse a esta realidad.

Por eso se hace urgente que los tres gobiernos, el Federal, el Provincial y la Alcaldía, unan esfuerzos y realmente piensen en grandes proyectos de vivienda, que actúen como un plan de choque para el problema, porque lo que han propuesto hasta ahora, a parte que se va demorar su construcción, no dará abasto para la gran demanda que crece y crece. En los últimos años se han construido cerca de 10 mil viviendas, en el mismo periodo la demanda fue de 17.000 nuevos hogares. Los alquileres venían subiendo a un ritmo alto,  7,6 por ciento  anual, que ya era alto, pero en los últimos meses el incremento fue mayor, creció a un ritmo del 17 por ciento.

En las últimas semanas La Portada Canadá ha realizado varios informes sobre el gran problema que enfrentan los que quieren vivir en Toronto a la hora de encontrar una vivienda, los constructores han dicho que todo se debe a que no hay tierra para construir nuevas urbanizaciones o edificios para vivienda, mientras crece la demanda a un ritmo muy alto porque gran parte de los 350 mil inmigrantes que llegan a Canadá, buscan un lugar en el GTA, donde se cree que hay más empleos bien remunerados. Incluso los peticionarios de refugio que ingresan por Estados Unidos a Montreal, a los pocos meses ya se trasladan a Toronto, donde el Gobierno Municipal y  el Provincial, con la ayuda del gobierno federal, deben solucionarles el problema de alojamiento, al punto que ahora incluso se les debe pagar un lugar en los hoteles de la ciudad, porque no hay espacio en los albergues para tanta gente.

El problema es tan grave que en Toronto ya casi ni se consigue un pequeño apartamento de una habitación, para alquilar por menos de mil dólares o habitaciones por menos de 600 dólares, mientras el Alcalde anuncia soluciones e intenta sacar adelante la construcción 40 mil nuevas viviendas que hacen falta, con la ayuda de las empresas constructoras a las que les otorgará beneficios tributarios, pero esos proyecto no se verán realizados muy pronto.

Conseguir un apartamento, una casa o una habitación buena, bonita y barata, para rentar en Toronto, se está convirtiendo en toda una pesadillas o una lotería en la ciudad, incluso así no sea tan buena, bonita y barata, porque los precios de alquiler están por las nubes. Los que ya tiene un lugar bueno no lo quieren soltar, y en los edificios de apartamentos de más bajo precio o subsidiados, existe una larga lista de espera de personas de hasta 5 mil personas que buscan un cupo, por lo que la espera será de muchos años.

El problema según los expertos es que la ciudad no se preparó para la llegada de tantas personas. En los últimos años en Toronto aumentó desmesuradamente la población y la demanda de vivienda, por la gran cantidad de inmigrantes que han llegado, pero no creció al mismo ritmo la oferta de casas o apartamentos, porque no hay terrenos para construir, y los pocos que quedan son muy costosos.