Líder de la posición en Venezuela, completo 1000 días en prisión

CARACAS.- Si una solución en el horizonte a la crisis política, social y económica en que se hunde Venezuela, en momentos en que se creen regresen las marchas de protesta del gobierno, Leopoldo López, el mayor crítico del régimen venezolano, preso y símbolo de las arbitrariedades del gobierno de Nicolás Maduro, cumplió esta semana mil días en una cárcel, a la que llegó luego de entregarse a las autoridades.

Desde la cárcel militar de Ramo Verde donde está pagando una condena de 14 años de prisión, pide libertad para todos los presos políticos, y hace un llamado a los venezolanos a continuar con las protestas hasta sacar a Maduro del poder.

El dirigente del partido Voluntad Popular, ha visto pasar los meses esperando justicia en su caso, y purga una condena acusado de incitación a la violencia durante las protestas opositoras de 2014, que dejaron 43 muertos. Su proceso penal estuvo plagado de vicios. De acuerdo con la oposición, obedeció a evidentes motivaciones políticas y las pruebas fueron fabricadas. Ante las extremas condiciones de su reclusión, su esposa, Lilian Tintori, se ha convertido en uno de los rostros más visibles de la oposición. Por todas esas razones, diversas voces expresaron este fin de semana su solidaridad.

“Maduro parece obsesionado no solo con aislarlo de sus compatriotas y del mundo exterior, sino también con quebrarlo”, escribió en una columna José Miguel Vivanco, director para las América de Human Rigths Watch. Muchos otros líderes mundiales han pedido la libertad de López, a quien considera una víctima del régimen y la persona a que Maduro más le tiene miedo por la convocatoria que logra entre los venezolanos, mucho más ahora que se alistan más protestas.