Los Raptors necesitan reunirse después de la barrida en Washington

Foto cortesía de Rick Madonik / Getty Images

Por Eduardo Harari

 

Toronto. - No es necesario revisar el rendimiento de los Raptors en el Juego 4 de nuevo. Lo hicimos aquí la noche de, y luego aquí la mañana de, y luego aquí en detalle de un momento específico. Ya hemos hablado sobre las reacciones inmediatas del equipo después del juego aquí.

 

No es necesario, pero por supuesto: lo haremos.

 

Primero, el hermano pequeño de la ciudad, Delon Wright, habla sobre la estrategia y su propio desempeño. El momento desgarrador (si podemos llamarlo así) es cuando Delon admite que hubieron dos 3s que definitivamente rechazó. Está bien, mi chico.

 

El resto de los lamentos y comentarios aquí señalan cómo Wright y los Raptors están respondiendo a la creciente presión de los Wizards, y lo que tienen que hacer a continuación para tener éxito. Estar de vuelta en casa sin duda ayudará.

 

Doblando ese tema, el entrenador Dwane Casey abre su disponibilidad de medios con la charla de "confiar en el pase" y "dejarlo volar". Para un equipo de Raptors que lució decididamente durante el tramo del Juego 4, es un mensaje de sonido.

 

Casey le da a los Wizards algo de crédito aquí, al hablar sobre la velocidad y el poder de John Wall, y la "feather-iness" de Bradley Beal. No toma mucho conectar los puntos entre cómo jugaron los Raptors en el Juego 4, y cómo tendrán que jugar de manera diferente.

 

Finalmente, aquí está DeMar DeRozan con algunas reflexiones sobre su enfoque mental y mantenerse agresivo. Aun así, hubo una nota de remordimiento, tal vez, en la voz de DeRozan cuando habló de su propia actuación en el juego.

 

"Fue solo una de esas noches en la que te encuentras en el momento a veces, y te sale genial", dijo DeRozan. "A veces podrías encontrarte mirando hacia atrás deseando poder tomar unos cuantos tiros, podría haber sido ... que probablemente te sientes forzado. Anoche fue eso ".

 

Es algo así como un mantra con DeRozan, esta idea de "mantenerse agresivo", y es difícil no sacudirlo como un concepto central. Los Raptors se veían, si no del todo pasivos, al menos inseguros de lo que deberían haber estado haciendo con y sin el balón en la recta final del Juego 4.

 

DeRozan puede desear poder tener algunas de esas tomas que retiró, pero es fácil simpatizar con él. El escuadrón de Toronto no sabía muy bien qué hacer con él y finalmente buscaba a DeMar para que algo sucediera. A veces eso funciona como una estrategia central, pero sí, muchas veces no funciona.

 

Ahora esperamos y vemos qué tipo de actitud tienen los Raptors en el Juego 5.