Miles de familias buscan vivienda de bajo costo en Toronto

TORONTO.- Una larga lista de espera deben soportar las familias de escasos recursos que buscan una vivienda subsidiada por el Gobierno o de un bajo costo de arriendo, especialmente porque por falta de recursos del Estados no se han realizado nuevas construcciones para enfrentar este problema social.

Se estima que en el gran Toronto hay miles de 70 mil familias o personas, esperando un cupo en una de estas viviendas de interés social, entre las que están las subsidiadas y las de bajo costo de arriendo, pero ya no hay en el mercado, porque se han dejado de construir.

La situación ha llevado a que el Gobierno replantee el programa y busque la forma que las empresas constructoras realicen proyectos de vivienda sin fines de lucro para ofrecer a estas familias o individuos un alquiler asequible.

El problema crece y el Concejo Municipal discutirá el tema el próximo mes, para buscar desarrollar un plan que favorezca a estas personas que les queda difícil adquirir una casa o apartamento, o pagar la renta de una propiedad con los altos costos que se registran en la ciudad.

La situación no sólo se presenta en Toronto, es por ello que hasta el Gobierno Provincial está buscando la manera de que las empresas constructoras hagan proyectos de viviendas asequibles para personas de bajos ingresos en otras poblaciones, porque muchos residentes luchan para poder pagar el alquiler, mientras se construyen en sus zonas lujos edificios, imposibles de comprar.

Actualmente algunos constructores no quieren que en sus edificios se les obligue a crear espacios para personas de escasos recursos, porque esto podría ir en contra de sus ventas, pero el Gobierno mantiene su posición de que las personas de escasos recursos deben tener los mismos derechos y opciones de cualquier ciudadano.

La discusión se centra en que algunos constructores quieren que se construyan edificios completos para atender esta demanda, y no que se hagan unas pocas unidades en cada edificio, porque eso es lo que está generando la falta de viviendas económicas.

Muchas personas viven en apartamentos subsidiados por el Gobierno, pagan una cuota mínima de arriendo, en zonas donde los apartamentos pueden alcanzar cifras que sobrepasan los mil dólares, pero de estas opciones no hay muchas en la ciudad, de ahí que tanta gente esté buscando donde vivir.

El Gobierno permite que los municipios otorguen beneficios a las constructoras, especialmente que puedan construir más alto y en mayor espacio, siempre y cuando se creen unidades asequibles para los más pobres, o se creen espacios de beneficios públicos tales como parques y guarderías.

El nuevo plan del Gobierno busca que se construyan condominios donde los aparta estudios no superen el valor de renta de $ 700, los apartamento de una habitación no sobrepasen los $ 900 dólares, incluidos los costos de administración, algo casi imposible de conseguir dentro de Toronto.