No se debe permitir explotación de trabajadores agrícolas temporales en Canadá

EDITORIAL COMERCIO LATINO. Cada año se conocen informes de la violación de los derechos laborales de estos trabajadores temporales, a los que se suman otro tipo de problemas que deben enfrentar estos extranjeros, como racismo, malos tratos y explotación.

TORONTO.- Hay dos realidades de gran peso en el programa de trabajadores temporales agrícolas en Canadá, por un lado están la agroindustria canadiense que requiere de la mano de obra extranjera para hacer las siembras y recolectar las cosechas, porque los canadienses no quieren realizar este tipo de trabajo, por los bajos salarios, y por el otro lado están los miles, por no decir millones de personas en países de Centroamérica y el Caribe, además de México, que buscan una oportunidad para poder venir a trabajar a Canadá, donde reciben un salario, que si bien representa mucho más de lo que ganaría en sus países por la misma labor, no se debe prestar a la explotación, y mucho menos a la violación de los derechos humanos y laborales establecidos por la Ley canadiense, porque ellos trabajan es en Canadá.

La semana pasada Comercio Latino publicó la denuncia del Centro de Defensa de la Seguridad de los Ingresos (Income Security Advocacy Centre, ISAC, por sus siglas en inglés) en la que se afirma que se estarían violando los derechos laborales de alrededor de 100 trabajadores temporales, ante lo cual elevaron una petición al Tribunal Federal de Apelaciones de Toronto, para que se pronuncie sobre lo que ellos denominan una injusticia contra un grupo de trabajadores temporales agrícolas extranjeros.

Cada año miles de trabajadores extranjeros, llegan a Canadá a trabajar en la siembra y recolección de cosechas, bajo un contrato, una vez terminado su trabajo estas personas deben regresar a su país y el próximo año vuelven a ser contratados, bajo el programa de trabajadores temporales extranjeros, pero según los organismos que defienden a estos trabajadores agrícolas, varios han afirmado que han sido víctimas de diferentes abusos por parte de sus patrones, especialmente porque la mayoría no hablan ni inglés, ni francés fluidamente, no conocen las leyes y tienen miedo de denunciar, porque saben que no los volverían a contratar.

Durante años hemos escuchado muchas historias sobre violaciones de los derechos de estos trabajadores temporales algunas denuncias han llegado a los medios de comunicación y unas pocas han logrado hacer su trámite legal con resultados positivos para los trabajadores, que han sido indemnizados o han podido mejorar sus condiciones de vida durante el tiempo que pasan viviendo en Canadá, pero el problema por lo visto aun continua, porque van en aumento las denuncias.

Si bien hay que destacar que son muy pocas las empresas Canadienses que incumplen con estos trabajadores, aquí lo importante es que tanto el Gobierno Canadiense, como los gobiernos a los cuales pertenecen estos trabajadores temporales, verifiquen las condiciones de vida en las que están ingresando estas personas a trabajar a Canadá, que se establezca si las empresas agrícolas que los están contratando están cumpliendo con lo establecido, pero quizás lo más importante que se creen mecanismos especiales para que estas personas, sin ninguna presión, sin miedos y bajo todo tipo de garantías, puedan realizar sus denuncias, porque muchos prefieren vivir sometidos a este tipo de explotación moderna y guardar silencio, a quedar sin trabajo, porque lo necesitan, como Canadá necesita de ellos.