Pese a las críticas, se abrió la temporada de caza de focas en Canadá

Comercio de las pieles y grasa ha disminuido, por lo que se esperan menos cazadores este año.

Pese a las críticas del mundo, al repudio de los ambientalistas y defensores de los animales, nuevamente se dio inicio a la temporada de caza comercial de focas en Canadá, y aunque las plataformas animalistas estiman que será similar a la del año pasado, 468.200 ejemplares masacrados, muchos creen que por la presión, pero especialmente porque la gente ya no está comprando las pieles, ni la grasa del animal, serán mucho menos los cazadores y por supuesto las focas masacradas este año. La caza de focas es un trabajo que tiende a desaparecer en Canadá.
 

OTTAWA.- La triste historia de la caza de focas que cada año se realiza en Canada fue abierta a partir del 10 de abril, y desde mucho antes los cazadores ya estaban listos para iniciar la masacre de estos animalitos que son perseguidos por su piel y su grasa. La buena noticia es que se cree que este año serán mucho menos las focas sacrificadas porque ya no hay tantos compradores, ni cazadores como antes, porque el precio de las pieles esta por el suelo.
 

El año pasado en Canadá se mataron alrededor de 468.200 ejemplares de foca pía (Pagophilus groenlandicus), unos 60.000 ejemplares de foca gris (Halichoerus Grypus) y unos 8.200 ejemplares de foca capuchina (Cystophora cristata), pero debido básicamente a las campañas internacionales de protección de los animales que han llevado la industria a su más baja expresión, se cree que este año la cifra va disminuir por debajo de los 400 mil.
 

Será la primera vez que solo unos cientos de cazadores canadienses saldrán a capturar los animales, una cifra totalmente inusual: en 2014 fueron 393, mientras que en la cacería de 2006 el registro superaba los 5.500. La cifra para este año es de menos de 200 cazadores registrados y con permiso de matar, especialmente porque ya no hay mercado para su producto. La Unión Europea desde hace 10 años ha prohibido importar la piel de las focas.
 

Si la situación continua así, y se sigue haciendo conciencia, la caza de las focas es un trabajo que va desaparecer, porque dejó de ser un negocio luego que treinta y cinco países prohibieran los productos derivados de los animales: los 28 Estados Miembros de la UE, Armenia, Taiwán, Rusia (cuyo mercado representaba alrededor del 90% de las exportaciones de pieles de foca procedentes de Canadá), Kazajistán, Bielorrusia, México y Estados Unidos. Y China lo está considerando. «Con pocos mercados internacionales hacia los que dirigir la producción, la actual caza de focas cuesta más en tasas que lo que en realidad reporta a la economía de Canadá.
 

Según reportes del Gobierno la inversión que hay que realizar para controlar la caza ya duplica el valor de lo que se obtiene de ésta, pero no se puede poner fin porque hay familias que aún sobreviven de la caza, y para ellos esta empresa hace parte de su historia y su cultura. Por ahora se sabe que los gobiernos de Canadá y las provincias de Terranova y Labrador han apoyado a los cazadores y buscan alternativas para ellos, pero sin éxito, pero ante la prohibición mundial los comerciantes se están quedando sin mercado.
 

La prohibición europea para importar pieles de estos mamíferos que está vigente desde 2009, ha hecho que el valor de las focas caiga constantemente. El año pasado se pagaron 31 dólares de media por piel, mientras que en 2006, se superaron los 105 dólares. Los productos derivados de las focas, también han caído en la lista de desacreditados para los consumidores, y de las 14 fábricas que operaban en los años 90´, ahora solamente quedan dos abiertas en Canadá. Los nuevos productos derivados de las focas, que el gobierno canadiense ha subsidiado en distintas áreas del país, no han tenido tampoco el éxito esperado.
 

“Con pocos mercados internacionales hacia los que dirigir la producción, la actual caza de focas cuesta más en tasas que lo que en realidad reporta a la economía de Canadá. La inversión que hay que realizar para controlar la caza ya duplica el valor de lo que se obtiene de ésta”, publicó el Fondo Internacional para el Bienestar Animal, sobre la cacería prevista para este año.