Por su mal estado Alcaldía de Toronto cerrará 400 vivienda públicas en la ciudad

Mientras cierra unidades, cerca de 200 mil personas están a la espera de una vivienda subsidiada

Muchos edificios de apartamentos en Toronto que son subsidiados por el Gobierno y donde viven personas de muy escasos recursos, se han convertido en verdaderas cloacas, en muy mal estado, sucias y llenas plagas, que pueden generar varios problemas de salud pública y además corren el riesgo de caer. Por eso la Alcaldía y la municipalidad han decidido cerrar por ahora 400 unidades, y se está investigando que se hace con otras 17 mil viviendas que también tienen serios problemas.

TORONTO.- Para nadie es un secreto que en Toronto existe varios edificios de apartamentos para personas que viven de las ayudas del Gobierno que estas en muy mal estado, o que se han transformado por el abandono en verdaderas cloacas, donde abunda el mugre, los delincuentes y los insectos, pero también donde habitan familias de muy escasos recursos que no tiene otra alternativa de alojamiento, y ahí pueden pagar hasta menos de 100 dólares por un apartamento de hasta 2 habitaciones, cuando en Toronto el promedio de renta de una apartamento ya supera los $1.200 dólares.

Ante la situación la Alcaldía y el Concejo Municipal han disidido por ahora cerrar 400 unidades de estas viviendas sociales de propiedad de Gobierno, que ya que están en tan mal estado que es preferible derrumbarlas para hacer una nueva edificación. Pero la situación es aún peor, porque se estima que unas 17.000 unidades más estarían en alto riesgo de correr la misma suerte, por el mal estado que se encuentran, pero el problema es que no hay viviendas para las personas que quedarán sin techo, porque hace años no se construyen viviendas sociales.

Por ahora la Alcaldía decidió que las 400 unidades que están en deplorable estado serás cerradas, y sus habitantes serán trasladados a otros lugares, pero no se ha tomado una determinación con los otros miles de apartamentos que están también en muy mal estado y que representan el 30 por ciento de las viviendas sociales que tiene la ciudad.

Cabe recordar que el Gobierno municipal está pidiendo apoyo a los gobiernos federales y el Provincial, para desarrollar en la ciudad un gigantesco plan de vivienda de interés social, que ayudaría a cerca de 200 mil familias que están en fila esperando por una de ellas, y que no pueden comprar ante los altos precios que han alcanzado las casas y los apartamentos en la ciudad.

El Alcalde ha dicho que va a continuar presionando públicamente a la provincia por dinero para el transporte público y la vivienda social en la ciudad. Según sus declaraciones tenía la esperanza de que la provincia incluyera algunos fondos para reparación de viviendas de interés social en el presupuesto, pero la repuesta de la Premier era que no había dinero para este fin y sólo se invertirían los $ 130 millones que ya se había anunciado. La Alcaldía dice que requiere mucho más si se quiere enfrentar el problema social por la falta de unidades, porque se necesitan construir miles de viviendas antes del 2018, porque se van a cerrar muchas por su mal estado.

El Alcalde John Tory aseguró que tiene un equipo especial trabajando duro para enfrentar el problema de la falta de vivienda de interés social en la ciudad, mientras varias organizaciones están exigiendo una respuesta más afectiva de parte del Estado a la problemática que se vive en el GTA por la falta de viviendas de bajo costo, y ante el aumento desmesurado de los arriendos que obligan a muchas personas a buscas los subsidios del Gobierno o vivir en esta propiedades que están muy abandonadas.

Para las ONG, una vivienda asequible, segura y protegida es identificada por las Naciones Unidas como un derecho humano básico (la Declaración Universal de los Derechos Humanos y el Pacto Internacional de Derechos Económicos, Sociales y Culturales), derecho que Canadá debe respectar, porque esto significa que el estado se compromete a apoyar el derecho de todas las personas que viven en una vivienda del gobierno, en las mejores condiciones de vida, y protegidas contra el desalojo.

Para los especialistas en el tema, el cierre de las viviendas, así estén en muy mal estado, va generar un gran problema para la ciudad, porque por ahora no hay unidades disponibles, y si una larga lista de personas esperando por un apartamento o una casa subsidiada. En Toronto se estima que hay una lista de espera de personas que esperan una vivienda social, cercana al 25 por ciento de la población local.