Cumbre de los “tres amigos” demostró que las relaciones siguen enredadas

El enredo de manos que protagonizaron los gobernantes de Canadá, el Primer Ministro, Justin Trudeau; el presidente de México, Enrique Peña Nieto, y el Presidente de Estados Unidos, Barack Obama, para la foto oficial de la Cumbre de Líderes de Norteamérica en Ottawa, es casi la representación de lo que pasa realmente en las relaciones de los tres países, porque si bien se ha avanzado en muchos aspectos especialmente el económicos, cuando se habla de un verdadera integración de la región, con paso libre por las fronteras, sin muros, con una fuerte lucha por la defensa de los derechos humanos, sin visa, y otros temas delicado, las discusiones se posponen en el congelador.
 

EDITORIAL.- Tratado de Libre Comercio de América del Norte (TLCAN), al que se le realizarán algunos ajustes, parece que marcha bien, pese  a las críticas y las acusaciones que hay en los tres países porque ese libre mercado afecta a algunas empresas y algunos trabajadores. El intercambio comercial fluye sin mayores contratiempos, regido por la oferta y la demanda, pero como la unión de los tres países no es solo comercial y la cita de los tres amigos demostró que hay muchos temas que aún están enredados y que el Primer Ministro de Canadá, Justin Trudeau; el presidente de México, Enrique Peña Nieto, y el presidente de Estados Unidos, Barack Obama, en Ottawa, no lograron por ahora desenredar.
 

El enredo de manos de los mandatarios generó la burla sobre la reunión en las redes sociales y generó muchos videos y fotos del bochornoso momento en el que se dijo que Obama y Trudeau ignoraron completamente a Peña Nieto, lejos de esos comentarios y las críticas, está generando un análisis más profundo de estos encuentros, y es que los temas económicos entre los tres países es en lo que realmente se ha avanzado, pero los otros temas más delicados y que tienen que ver con las relaciones publicas y sociales, siempre se quedarán en el tintero, porque ningún presidente quiere confrontar al otro.
 

Los tres mandatarios coincidieron que lo importante ahora es lograr el mayor desarrollo económico de la región y para ello estuvieron de acuerdo en eliminar muchas restricciones a las exportaciones e importaciones que aún persisten entre las tres naciones, y hasta se habló de la crisis de Venezuela, y los atentados terroristas en EE.UU., y el mundo, pero no de otros problemas como la violación de los derechos humanos en México, que causaron protestas a la llegada del Presidente a Canadá. .
 

Para el Primer Ministro de Canadá los acuerdos alcanzados entre Canadá, México y Estados Unidos durante la cumbre, para crear una asociación de cooperación en materia medioambiental, energética y para la lucha contra el cambio climático, fue lo mejor. La cumbre de los "Tres Amigos", el título que le han dado a este encuentro entre los líderes buscará por ahora eliminar las tendencias proteccionistas que se quieren implantar en los tres países, impulsados por líderes políticos que aún no aceptan el libre mercado, porque se afectan las empresas y generan desempleo en algunas partes de la región, algo que muchos ven como un mal necesario, pero que otros ven como la imposición del país más fuerte sobre los otros dos.
 

En lo que sí estuvieron completamente de acuerdo los tres mandatarios es desarrollar un plan de energías limpias, para ayudar al medio ambiente, por lo que pretenden impulsar un marco legal, para reducir los gases de efecto invernadero. Sobre los temas de salud, educación, derechos humanos y migración, un sistema tributario justo, del que se beneficien todos por igual, se dijo mucho, pero fue muy poco lo que se acordó, de ahí que todos creen que las manos de los gobernantes seguirán algo enredadas, porque como dijo el Presidente de México "no hay soluciones simples" .