Por fallas Gobierno obliga a revisar cerca de 2 millones de vehículos en Canadá.

Existen defectos en el airbag. Las marcas de los vehículos afectados y que deben pasar a revisión son: Honda, Mazda, General Motors, Toyota, BMW, Nissan, Ford y Fiat Chrysler.
 

OTTAWA.- Si usted tiene un vehículo cuyo sistema de seguridad de los airbag de la firma japonesa Takata, deberá llevarlo lo más pronto posible a la empresa fabricante o a su agente vendedor, porque el Gobierno informó que obligará a llamar casi 2 millones de propietarios de estos automóviles en el país, que tienen defectos en este sistema de protección en caso de accidentes.
 

El fabricante más afectado es Honda, que ha llamado a revisión 704.770 vehículos; seguido por Fiat Chrysler, con 374.508; Toyota, con 107.339; Ford, con 102.540; Nissan, con 55.824; BMW, con 30.838; General Motors, con 29.900; y Mazda, con 1.130.
 

Tras semanas de silencio sobre la magnitud del problema en Canadá, el Ministerio de Transporte dio a conocer una base de datos que señala que más de 1,95 millones de vehículos están con el sistema de airbag defectuoso y tendrán que ser llamados a revisión.
 

En Estados Unidos, el defecto de los airbag de Takata ha obligado a llamar a revisión a un total de 33,8 millones de vehículos. Durante meses, Takata se negó a reconocer que el defecto fuese un problema excepto en determinadas condiciones de temperatura y humedad por lo que se negó a llamar a revisión los vehículos dotados con los airbag defectuosos.
 

Pero a finales de 2014, las autoridades federales estadounidenses solicitaron a los fabricantes de automóviles que sustituyesen los airbag de Takata ante la negativa de la empresa de reparar de forma voluntaria las bolsas de aire.
 

Finalmente, el pasado 19 de mayo, Takata llegó a un acuerdo con Washington y reconoció que airbag producidos en una de sus factorías en México tienen un defecto que puede provocar la explosión del aparato y producir graves lesiones, e incluso la muerte, a los ocupantes de los vehículos afectados.

El problema se centra en los infladores de las bolsas de aire que utilizan un gas como propulsor que puede degradarse con el paso del tiempo y explotar en el momento de activación.