Con fuertes “golpes” avanza la guerra comercial entre China y EE.UU.

Disputa puede generar una crisis económica mundial

En respuesta a las medidas de Estados Unidos, China anunció la imposición de aranceles comerciales a 128 productos estadounidenses, entre ellos frutas, frutos secos y vino, tendrán un arancel del 15%, mientras que productos porcinos y relacionados tendrán un arancel del 25%, según anunció el Ministerio de Comercio. En este choque de las dos grandes potencias, que está afectado a otros países, ahora se espera una nueva respuesta estadunidense que puede generar una crisis económica mundial.

LONDRES.- La creciente tensión en materia comercial entre China y Estados Unidos, deja ver que avanza una guerra comercial entre las dos mayores economías del mundo, que podría afectar a todo el mundo. El Lunes mediante un comunicado el Ministerio de Comercio de China, dijo que decidió imponer aranceles a productos estadounidenses, porque le pidió a los norteamericanos dar marcha atrás en sus medidas contra el acero y aluminio chinos, que según Pekín violan las normas de la Organización Mundial de Comercio (OMC) y a devolver los intercambios bilaterales a la senda de la normalidad, pero no obtuvo respuesta, ante lo cual el país asiático respondió con la misma moneda, impuestos a 128 productos norteamericanos.

Cabe recordar que por disposición del Presidente Donald Trump, hace un mes los chinos deben pagar un 25% en exportaciones de acero y del 15 % en las de aluminio al país norteamericano. Se estima que la medida le representa a los empresarios chinos cerca de $60.000 millones de dólares.

Trump busca reducir el déficit comercial de Estados Unidos respecto a China, de unos 375,200 millones de dólares en 2017, según las aduanas chinas.

Pese a la nueva medida, China sigue insistiendo que quiere evitar una guerra comercial, y advirtió a la Casa Blanca sobre el peligro que representa la imposición de aranceles, que afectará a las dos grandes economías.

Los artículos que serán afectados por las nuevas medidas de China, son en su mayoría frutas y sus derivados, pero además la carne porcina estadunidense que tendrá que pagar un 25%, a los chinos, si quiere seguir en su canasta familiar. La medida entró en vigor el mismo lunes que se dio a conocer, según el Gobierno Chino, que asegura que las medidas estadounidenses son un "ataque grave" contra los principios de la OMC y una falta a "la no discriminación", que "es la base del sistema de comercio multilateral".

Aunque la decisión de colocar aranceles a varios productos que ingresan a EEUU,  afecta a otros países, China es uno de los más afectados porque gran parte de sus exportaciones tienen como destino final Norteamérica, pero de seguir la guerra comercial, otros países sentirán los duros golpes, entre ellos Canadá y México, por ahora socios comerciales.

Uno de los sectores estadounidenses que están más preocupados por la inminente guerra comercial con China son los ganaderos y productores agrícolas. Brad Grootenhius, un granjero de Iowa, lo resume así: "nosotros exportamos carne de cerdo a China y tememos que nuestras ganancias comiencen a desplomarse".

A pesar de que Trump sostiene que "las guerras comerciales son buenas y fáciles de ganar", la decisión de Pekín "será un duro golpe para Washington, y Estados Unidos va a pagar un alto precio por su política comercial radical hacia China", aseguró el Global Times.

La política comercial de Trump ha sido criticada con fuerza por diversas organizaciones, y la propia OMC anunció hace unos días que observa con gran atención y cautela las primeras consecuencias de las decisiones de Estados Unidos.