Este domingo será crucial para la elección del Presidente de Francia

Marine Le Pen, con discurso nacionalista al estilo Trump, ganaría la primera vuelta

La campaña electoral en Francia llega a su fin con dos fuertes candidatos, Emmanuel Macron y Marine Le Pen, quienes marchan como favoritos a ganar la primera vuelta de las elecciones presidenciales en Francia, luego de pelear con todos los argumentos posibles el voto de los indecisos, quienes se creen realmente definirán el futuro de este país, porque los dos candidatos están en polos totalmente opuestos. Ella es una conservadora, nacionalista de extrema derecha, que promete luchar contra el terrorismo y asegurar el empleo para los franceses, y el otro, un joven, que llega con ideas de abrir más este país a Europa y al mundo.

PARIS.- Los franceses se juegan el futuro del país y la supervivencia de la Unión Europea en las elecciones presidenciales. La dura lucha se vivirá en la primera vuelta que se realiza este domingo 23 de abril, que tiene como los más posible ganadores al candidato centrista, Emmanuel Macron, y la candidata de extrema derecha, Marine Le Pen, quienes en polos totalmente opuestos, tienen el 22 por ciento de la intención de voto, y marchan por delante del conservador François Fillon y el representante de la izquierda radical, Jean-Luc Mélenchon, que se quedaron un poco por debajo en las encuestas, pero quienes aún tienen serias posibilidades de seguir en su camino a la Jefatura de Gobierno.

La segunda vuelta se realizará el próximo 7 de mayo, día en que se sabrá realmente quién ocupará la Presidencia de este país hasta 2022, años en que se estima que el nuevo presidente deberá tomar fuertes decisiones que pueden cambiar muchas cosas para Francia frente al mundo, porque este país es miembro permanente del Consejo de Seguridad de Naciones Unidas; principal potencia de la Unión Europea junto con Alemania, protagonista dentro de la organización internacional de la francofonía que designa a la comunidad de 900 millones de habitantes que usan el francés como lengua y de la que son miembros otros 48 Estados en el mundo; potencia nuclear aliada a Estados Unidos en la OTAN; principal referente económico, político, cultural y militar dentro del continente africano, sobre todo para varios países que la tuvieron como capital colonial hasta mediados del siglo XX; interlocutor privilegiado de países claves del norte de África y Oriente Medio, también por causa de sus importantes vínculos históricos; y finalmente, principal potencia marítima con presencia en lugares tan alejados de París como Oceanía, Medio Oriente o América.

Una de las firmes candidatas a ganar este domingo es la representante de la extrema derecha, Marine Le Pen, quien con su discurso nacionalista, muy conservador y contrarios a muchas de las políticas de la Unión Europea, ha logrado ganar seguidores en todo el país, especialmente entre las clases populares que creen que ella defenderá el empleo para los franceses, y defenderá a su país de la llegada de terroristas. El discurso de esta candidata se parece mucho al de la reciente campaña de Donald Trump, que ganó la presidencia en Estados Unidos.

El más firme rival contra Le Pen y que se cree también pasará a la segunda vuelta es Emmanuel Macron, de solo 39 años. Estudió Ciencia Política donde se forman las más selectas elites francesas: en el Instituto de Estudios Políticos de París y en la Escuela Nacional de Administración. Fue socio luego en la Banca Rothschild, y en 2014 alcanzó a ser ministro de Economía del actual presidente Hollande. A pesar de ser criticado por izquierdas y por derechas en esta campaña, si

finalmente llega a la segunda vuelta, lo más probable es que termine agrupando diferentes corrientes políticas de su país, que no quieren ver ganar a Le Pen en el balotaje.

Si Macron gana, una generación pro europea, joven, nueva y con lustre, estaría así alcanzando el poder. Sus desafíos serán sin duda enormes. Europa y el mundo están atentos: Francia decide.