La Copa mundial femenina terminó alzando la bandera de estrellas de nuevo

Foto cortesía de Reuters Images

 

Por Eduardo Harari

 

Toronto. – La selección naranja de Holanda nunca estuvo en el juego, desde que pisaron el césped del Parc Olympique Lyonnais para el partido final de la Copa del Mundo Femenino contra el super equipo estadounidense ranqueado # 1.

 

El equipo estadounidense arraso con todos sus oponentes concediéndoles ninguna misericordia en su camino a ganar su segundo tropeo en 4 años. Comenzó con una aplastante victoria sobre Tailandia en la ronda de grupos de 13-0 que equivale a la cantidad total de goles anotados por el equipo masculino nacional de Estados Unidos desde el 2006.

 

Cuando el polvo se despejó, las holandeses fueron derrotados 2-0 y las calles de Lyon estaban llenas de seguidores estadounidenses celebrando el éxito del programa de deportes femeninos más exitoso en los últimos 10 años.

 

Holanda era el no favorito, socavando el hecho de que ganaron el Campeonato Europeo Femenino de la UEFA hace dos años. Jugaron un juego valiente hasta el minuto 61, cuando Megan Rapinoe hundió un penalti a la derecha de la net.

 

La notoria capitana estadounidense, que fue desafiada por el presidente Trump después de su tweet viral sobre no ir a Washington después de una victoria de Estados Unidos en Francia, anotó su 6to. gol del torneo igualando con su compañera de equipo Alex Morgan para la Bota de Oro del torneo.

 

Con el marcador 1-0 a favor de Estados Unidos, Rose Lavelle añadió el toque final al partido anotando el segundo gol que puso a Holanda en una desventaja desmoralizadora con 20 minutos restantes en el encuentro.

 

El New York Times, Rory Smith se refirió este partido como una "Invasión Americana de Lyon", describiendo la colorida exhibición de los atuendos de los fanáticos estadounidenses que daban la sensación de un juego que se jugaba en suelo estadounidense.

 

En total, fue la Copa Mundial Femenina más exitosa de la historia con una audiencia televisiva estimada de más de 1.000 millones de espectadores en todo el mundo y la más exitosa en las taquillas, vendiendo la apertura, semifinales y juegos finales dentro de las 48 horas después de que las entradas salieran a la venta.

 

Sólo para notar que la batalla por el tercer lugar en el torneo fue ganada por Suecia sobre Inglaterra por un marcador de 2-1.