Una buena inspección, paso importante para comprar una casa

Por: Lupe Ledesma

En Canadá como en cualquier lugar del mundo, un verdadero profesional le puede ahorrar mucho dinero, porque una mala inspección de la vivienda podría salir muy costosa, dependiendo de las reparaciones que luego se le deba hacer.
 

Es normal que toda persona que quiere vender una vivienda la va a “maquillar” y decorar de la mejor forma posible para obtener un buen precio, por eso no hay que dejarse guiar por la apreciación del buen estado de la pintura, porque detrás de ello se pueden esconder detalles estructurales muy importantes, daños que le van aparecer en el futuro y que van a significar miles de dólares.
 

Antes de finalizar un proceso de compra lo mejor que puede hacer un comprador es contratar una inspección profesional, porque aunque esto no le dará la garantía del cien por ciento de que el bien inmueble no tiene problemas, si será un buen indicador del buen estado o mal estado de la vivienda, y los posibles arreglos que deberá hacer, para que la persona haga cuentas y decida si compra o no.
 

Los agentes de bienes raíces tenemos por obligación de orientar a nuestros clientes de la mejor forma posible, y en el caso de los inspectores yo solo recomiendo a los mejores, a verdaderos profesionales porque se dé la importancia de ellos en el proceso, pero si va a comprar una casa debe saber que el asesor por Ley, no solo le debe recomendar un inspector, sino varios, de tal forma que usted pueda seleccionar. También usted tiene la posibilidad de buscar un inspector de su confianza, porque en este paso lo importante es que realice bien el trabajo.
 

La inspección profesional de una casa ayuda a responder muchas preguntas, disipar los temores, y mirar realmente que es lo que se está comprando, porque inclusive muchas casas nuevas pueden tener más problemas que no son perceptibles a simple vista, que una casa vieja o usada.
 

La revisión de la casa y su posterior informe le permite al comprador planificarse financieramente, porque sabe a ciencia cierta qué tipo de reparaciones debe realizar, si estas se deben hacer de manera inmediata o se pueden postergar, lo que le ayudará a establecer costos de los trabajos futuros, sin desagradables sorpresas, porque realmente sabe lo que está comprando.
 

Un buen inspector le dirá si algo no está funcionando adecuadamente, sí necesita ser cambiado, o no es seguro, también le dirá si es necesario realizar reparaciones, y hasta incluso podrá dar un diagnóstico de los problemas que ha tenido en el pasado la propiedad, como la humedad.
 

Los puntos importantes que se deben revisar antes de comprar una casa son, las bases, el techo y las paredes exteriores, el sistema eléctrico, las redes de acueducto, drenaje y alcantarillado, los sistemas de calefacción y del aire acondicionado, y los aislamientos de las paredes, entre otros.
 

Un punto importante es que si luego de la inspección se encuentra un grave problema, se puede renegociar el precio, por el costo de las reparaciones que se deben hacer, casos que se dan comúnmente y en los cuales el agente de bienes raíces es fundamental para lograr bajar el precio.
 

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