Inmigrante despedido por denunciar peligros de contagio de Covid-19, ganó demanda en Canadá

Ontario Labour Relations Board, ordena indemnización y al darle la razón al trabajador agrícola mexicano  

En la granja que trabajaba Luis Gabriel Flores, alrededor de 200 trabajadores se contagiaron de Covid-19 incluso se registró una muerte, lo que lo llevó al inmigrante mexicano a realizar una denuncia pública ante los medios de comunicación sobre el peligro que estaban corriendo por la falta de protocolos de bioseguridad en su espacio laboral y de residencia. Eso le costó su trabajo, porque fue despedido inmediatamente. Sus denuncias llegaron incluso a generar un llamado de atención desde México a al Gobierno de Canadá y ahora el tiempo y órgano de control laboral en Canadá le da la razón, por eso pide a los cerca de 60 mil trabajadores temporales que llegan cada año a este país, no guardar silencio, si creen que les están violando sus derechos.

OTTAWA. - La Junta de Relaciones Laborales de Ontario se ha pronunciado a favor de un trabajador migrante de origen mexicano Luis Gabriel Flores Flores y contra una granja Scotlynn Sweetpac Growers que lo despidió por cuestionar la seguridad en materia de salud en las instalaciones donde debían vivir y trabajar, en medio de un brote DE COVID-19.

Por el despido injustificado el trabajador recibirá una indemnización, el pago total del contrato para el que llegó a Canadá, más 5.000 dólares por la angustia que sufrió por el peligro al que fue expuesto.  Flores fue despedido de Scotlynn Sweetpac Growersl, localizada en el condado de Norfolk, luego de exponer públicamente ante los medios de comunicación el alto riesgo de contraer el coronavirus al que estaban expuestos todos los trabajadores agrícolas. Se pudo establecer que alrededor de 200 empleados de esta granja resultaron contagiados con el virus, lo que le dio la razón al inmigrante mexicano, quien convivió con Juan López Chaparro, de 55 años, uno de los trabajadores que murió luego de contraer el virus.

"Hemos ganado esta batalla, pero tenemos que seguir luchando por la igualdad de derechos para los migrantes en este país", dijo Flores en una conferencia de prensa, implorando a otros trabajadores extranjeros que hablen sobre condiciones peligrosas en sus lugares de trabajo. "No tengas miedo. Atrévete a levantar la voz… Es importante que no nos quedemos callados. Unidos somos más fuertes".

Flores trabajó en la granja y compartió una residencia con otros trabajadores, entre ellos Chaparro, su compañero de litera, que se contagió, enfermó y murió. Según la denuncia el antiguo dueño de Scotlynn, Robert Biddle, lo despidió cuando le mostraron un video en el que el trabajador mexicano hacia denuncias a los medios de comunicación.

En virtud de la Ley de Salud y Seguridad en el Trabajo de Ontario, es ilegal que los empleadores penalicen, despidan, disciplinan, suspendan o amenacen en tomar cualquiera de estas medidas contra un trabajador que ha rechazado el trabajo inseguro.

De acuerdo a la norma, los dueños de las granjas deben proveer a los trabajadores temporales de lugares seguros para trabajar y vivir, y el transporte, en condiciones dignas.  Scotlynn recibió la orden de pagar a Flores $20,000 en salarios perdidos y $5,000 por la angustia que sufrió.

La investigación sobre el caso no arrojó pruebas que el empleador tomará medidas para evitar la propagación de los contagios.