Más de dos millones de inmigrantes han sido detenidos en la frontera de México y Estados Unidos

En los últimos meses gran parte de los detenidos son de Venezuela, Cuba y Nicaragua

En tan solo un mes, cerca de 300 mil personas fueron detenidas cruzando la frontera. El histórico número se alcanzó gracias al aumento de la llegada a Estados Unidos de cubanos, venezolanos y nicaragüenses. Estos representan un tercio de los detenidos de agosto.

TEXAS. – Las cifras hablan por sí solas de la gran tragedia humanitaria que significa el ingreso de inmigrantes a Estados Unidos, por primera vez, el número de personas detenidas en territorio estadounidense tras cruzar el Río Bravo ha superado los dos millones de personas en un año, de acuerdo a un informe de El País.

Aún sin terminar septiembre, Estados Unidos ha batido este lunes el registro de arrestos de inmigrantes en la frontera con México. Aunque esperada de acuerdo a varias proyecciones, la cifra pone más presión sobre la Administración del presidente Joe Biden, quien maniobra para que la inmigración irregular no se convierta, junto con la economía, en los temas centrales que guíen las elecciones legislativas de noviembre. El hito llega en un momento donde los gobernadores republicanos están usando a los inmigrantes como parte del juego político, enviándolos en buses y aviones fletados con dirección a bastiones demócratas del norte del país.

Los agentes de la patrulla fronteriza detuvieron durante agosto a 203.598 personas. Ha sido el colofón de un intenso verano, la época del año en la que mayor flujo migratorio se nota en la frontera entre México y EE UU. Mayo ya anunciaba la tendencia al alza. En ese mes fueron arrestadas 293.000 personas, lo que ya significaba un aumento respecto a abril.

Las autoridades del Servicio de Aduanas y Protección Fronteriza (CBP, por las siglas en inglés) estiman que para el fin del año fiscal 2022 (que se cuantifica de septiembre de 2021 al cierre de este mes) se habrán hecho más de 2.3 millones de detenciones. Esta cifra contempla que una misma persona puede haber sido detenida más de una vez gracias a una norma impuesta por Donald Trump en la pandemia y conservada por Biden. Esta permite la deportación rápida de inmigrantes, quienes pueden volver a intentar el cruce días después.

El histórico número se alcanzó gracias al aumento de la llegada a Estados Unidos de cubanos, venezolanos y nicaragüenses. Estos representan un tercio de los detenidos de agosto. Esta ha sido la explicación que Biden ha dado este martes a los periodistas que le increpaban para saber por qué la frontera se ha colapsado durante la Administración demócrata. “Hay menos migrantes de México y Centroamérica y ahora tenemos bajo vigilancia a Venezuela, Nicaragua y Cuba”, dijo el presidente, quien reconoció que la deportación de estos ciudadanos de vuelta a sus países es “irracional”. En cambio, dijo el mandatario, están trabajando con los gobiernos de Andrés Manuel López Obrador, en México, y sus homólogos centroamericanos “para frenar el flujo”.

El comisionado de la CBP, Chris Magnus, también había responsabilizado a “los fallidos regímenes comunistas en Venezuela, Nicaragua y Cuba” de la nueva ola migratoria en el hemisferio occidental, lo que había disparado las aprehensiones en la frontera sur. El funcionario explicó el lunes que la falta de relaciones diplomáticas con estos países ha hecho más difícil la repatriación.

Agentes de la Patrulla Fronteriza estadounidense, asistidos por un helicóptero y perros rastreadores, recorren la región de las montañas Baboquivari en búsqueda de un grupo de migrantes que está evadiendo la captura.

En total, la CBP habrá hecho este año fiscal 600.000 detenciones más que el año pasado, que se cerró con 1.7 millones de encuentros, el eufemismo con el que se reportan las acciones de vigilancia en la frontera con México.