Norteamérica bajo el ataque de múltiples patógenos, COVID-19, el VRS y gripe

Alerta, a medida que bajan las temperaturas aumentan enfermedades respiratorias en EE.UU., y Canadá

Por las enfermedades respiratorias el año pasado los hospitales infantiles debieron cancelar cirugías importantes con el fin de redistribuir al personal para ayudar en los abarrotados departamentos de emergencia y unidades de cuidados intensivos. La situación se vio agravada por el escaso y a veces inexistente suministro de analgésicos y medicamentos para la fiebre de los niños, se teme que este año puede pasar lo mismo.

OTTAWA. – Las enfermedades respiratorias, especialmente en niños y adultos mayores entan llenando las salas de urgencia en gran parte de Norteamérica, especialmente en las zonas donde el frio invierno ya entro con su fortaleza.

Los expertos médicos advierten que Estados Unidos podría enfrentar un invierno "sindémico" a medida que aumentan los virus respiratorios y caen las temperaturas. Una sindemia no es diferente a la "tripledemia" con la que los sistemas de atención médica han lidiado en los últimos dos inviernos, cuando múltiples patógenos, como el COVID-19, el VRS y la gripe, convergen en una población. Sin embargo, una sindemia considera cómo las epidemias que interactúan tienen efectos cada vez más adversos en las comunidades que enfrentan desigualdades sistémicas y estructurales.

Raj Rajnarayanan, decano asistente de investigación y profesor asociado en el campus del Instituto de Tecnología de Nueva York en Jonesboro, Arkansas, le dijo a Fortune en una entrevista reciente que Estados Unidos es un "blanco fácil" cuando se trata de la amenaza de una sindemia.

"Las capacidades hospitalarias sobrecargadas, el agotamiento de la fuerza laboral, el agotamiento, la falta de herramientas terapéuticas efectivas, la mala comunicación, la falta de cumplimiento [de las precauciones contra la COVID], la falta de planificación de la continuidad y la influencia generalizada de los determinantes sociales de la salud" solo hacen que la delicada infraestructura de salud del país sea más frágil, dijo.

Hasta ahora, en Canadá y Estados Unidos, los virus respiratorios están aumentando a medida que aumenta la temporada de resfriados y gripe, pero es difícil predecir qué tan mala será la temporada y cómo se comparará con años anteriores.

En el último informe FluWatch de la Agencia de Salud Pública de Canadá (PHAC, por sus siglas en inglés), que finalizó el 25 de noviembre, dijeron que la actividad de la enfermedad se mantiene "dentro de los niveles esperados típicos de esta época del año".

El informe, que incluye las cifras de gripe de PHAC del 27 de agosto al 25 de noviembre, dice que se han reportado 7.594 casos de gripe en todo Canadá, el 97 por ciento de los cuales fueron de gripe A. La temporada de gripe del año pasado, que generalmente se extiende de noviembre a marzo en Canadá, registró cifras mucho más altas en esta época, con un aumento de COVID, VRS y virus de la gripe en todo el país, especialmente entre los niños.

Si bien el VRS y la gripe suelen surgir más tarde en las temporadas de otoño e invierno, ambos aumentaron a principios de la temporada 2022-2023, lo que significa que los tres virus alcanzaron su punto máximo aproximadamente al mismo tiempo.

Los hospitales infantiles de todo Canadá informaron de un aumento significativo de pacientes, lo que llevó a muchos a cancelar cirugías importantes con el fin de redistribuir al personal para ayudar en los abarrotados departamentos de emergencia y unidades de cuidados intensivos. La situación se vio agravada por el escaso y a veces inexistente suministro de analgésicos y medicamentos para la fiebre de los niños.