Protestas generan caos en Brasil, en la antesala al Mundial

BRASILIA.- Las protestas se iniciaron por un decreto que aumentó el precio del pasaje en bus, pero con el pasar de los días este pequeño motivo se ha trasformado en la ira de miles de brasileros, que decidieron salir a las calles demostrar su descontento contra el Gobierno y las autoridades por las grandes diferencias sociales que afectan al país que invierte millones de dólares en estadios para el Mundial de Futbol 2014, mientras hay muchas necesidades insatisfechas.

Caos, violencia, enfrentamientos entre manifestantes y policías, han trasformado esta protesta que se inició pacíficamente, en un serio problemas de orden público que tiene en aprieto a las autoridades, en el mismo momento que se realiza la Copa Confederaciones, que serviría como ensayo para mostrar lo bien preparado que esta el país para recibir a millones de turistas que llegarán el próximo año al mundial.

La violencia en las calles especialmente en Sao Paulo, Brasilia, Porto Alegre y Belo Horizonte, ya han generado que más de 100 personas resultaran heridas y alrededor de 20 fueran retenidas por las autoridades, que han utilizado balas de gomas, y gases lacrimógenos para detener la avanzada de los marchantes, que no se han detenido ante las barricadas montadas por la policía anti disturbios, y hasta se subieron en la azotea del parlamento.

La situación ha sido tan caótica en los últimos días, que ya hay quienes se han atrevido a decir que sería mejor pensar en trasladar el evento del 2014 a otro país, algo que resulta casi imposible y que seguramente no permitirá el Gobierno de Brasil, que ha invertido miles de millones de dólares en construir estadios y prepararse para dos grandes citas deportivas mundiales.

Por ahora la Presidenta Dilma Rousseff, quien sintió de frente el descontento de los brasileros, porque fue abucheada en la inauguración de la Copa de Confederaciones, ha hecho un llamado a la calma, pero afirmó que no permitirá se siga armando caos en las calles de su país.

El temor de que los manifestantes pudieran interrumpir los partidos de la Copa Confederaciones, generó que el Ministro de Deportes de Brasil, Aldo Rebelo, dijera que está de acuerdo con la represión que está ejerciendo la policía contra los manifestantes, lo que ha generado más ira de los manifestantes.  Por ahora la FIFA ha dicho que espera que el Gobierno sea capaz de garantizar el orden, mientras los manifestantes intentan llegar hasta los estadios para hacerse sentir.