Trump quitará derecho de nacionalidad a hijos de extranjeros nacidos en EE.UU.

Aunque no es cierto, porque en Canadá y otros 30 países hacen lo mismo, el Presidente de Estados Unidos, Donald Trump, dijo que es ridículo que su país sea el único del mundo en el que alguien viene, tiene un niño y ese niño es un ciudadano estadounidense. Bajo ese argumento el dio a conocer su proyecto para poner fin a la nacionalidad directa de una recién nacido en su país, que ya empezó a caminar en la Casa Blanca.

EDITORIAL.- En su guerra contra los inmigrantes y a pocos días de las elecciones, por lo que está buscando votos con propuestas populistas, el Presidente de Estados Unidos Donald Trump ha anunciado que pretende acabar con el derecho de las personas nacidas en EE.UU. de padres extranjeros a obtener la nacionalidad norteamericana, algo que muchos estadounidenses estaban pidiendo.

“Somos el único país del mundo donde una persona viene y tiene un bebé, y ese bebé es esencialmente ciudadano de los Estados Unidos durante 85 años, con todos los beneficios. Es ridículo. Es ridículo. Y tiene que acabar”, ha dicho el presidente, en su argumento para presentar la propuesta. Según datos del Gobierno, cada año nacen unos 350.000 niños de padres extranjeros en EE.UU.

En realidad en el mundo son más de 30 los países que ofrecen ese derecho de ciudadanía por nacimiento, entre los que se encuentran Canadá, Argentina, Brasil, Chile, Ecuador, El Salvador, Guatemala, Honduras, México, Uruguay, Colombia y Venezuela. En EE.UU. este derecho se introdujo con la decimocuarta enmienda de la Constitución, ratificada en 1868, y que asegura: «Toda persona nacida o naturalizada en EE.UU., y sujeta a su jurisdicción, es ciudadana de los EE.UU. y del Estado en que resida».

El mandatario aseguró que el decreto ya lo están preparando los abogados de la Casa Blanca, y que pretende acabar, a través de la orden ejecutiva, con el derecho a adquirir la nacionalidad estadounidense a aquellos nacidos en el país de padres extranjeros.

Trump ha anunciado esta última medida en su combate contra la inmigración ilegal, y la da a conocer justo una semana antes de unas elecciones legislativas en las que el republicano maniobra para movilizar a sus bases y evitar el pronosticado auge de los demócratas.

Los activistas contra la inmigración se suelen referir a estos niños de forma despectiva como «bebés ancla», porque la deportación de sus padres suele complicarse cuando tienen menores dependientes a su cargo. Cuando un ciudadano norteamericano cumple 21 años y alcanza mayoría de edad, puede solicitar la nacionalidad para sus padres.

La Constitución estadounidense reconoce desde hace 150 años el derecho a la ciudadanía a los nacidos en suelo estadounidense de padres no nacionales. Trump explica, en los extractos adelantados de la entrevista, que sus asesores le han indicado que podría hacerlo a través de una orden ejecutiva. El argumento es que la 14º enmienda, defienden, estaba pensada solo para los ciudadanos y residentes permanentes, no para los inmigrantes que están en el país ilegalmente.

El anuncio se produce al día siguiente de que el presidente informara de que va a enviar más de 5.000 soldados a la frontera sur del país para detener el paso a la caravana de buscadores de asilo que recorre México en dirección a la frontera con EE UU. El presidente Trump, que llegó a referirse a los comicios del próximo martes como “las elecciones de la caravana”, ha llevado el tema de la inmigración al centro de la campaña, confiando en que movilice a sus bases para que impidan en las urnas que los republicanos pierdan el control del Congreso.