Crisis por corrupción en Brasil arrastra a su presidenta y al ex presidente Lula Da Silva

BRASIL. La situación en Brasil tiende a empeorar, a la crisis económica y política a la que se enfrenta la Presidenta Dilma Rousseff, que ha generado gigantescas marchas de protestas en gran parte del país se le sumaron los graves casos de corrupción que ahora también involucran al ex presidente brasileño Luiz Inacio Lula da Silva, que estaría buscando la manera de ingresar al Gobierno para tener un fuero especial y no enfrentar a la justicia.
 

Los escándalos de corrupción y las masivas protestas que exigen la renuncia de la presidenta, están profundizando los problemas en Brasil un país que está a puerta de la realización de los Juegos Olímpicos en el verano.
 

El exmandatario fue detenido la semana pasada y liberado a las pocas horas, pero su caso salpica a decenas de personalidades de la vida política y empresarial del país sudamericano. Lula fue puesto en libertad tras un interrogatorio, pero los fiscales continúan investigando porque el mandatario tiene tantas riquezas, que según algunas denuncias corresponden a las recompensas que el ex sindicalista recibió por contratos concedidos por la petrolera estatal, Petrobras, a empresarios corruptos.
 

En 2010 Lula eligió a Rousseff como su sucesora en la presidencia y él mismo no había descartado volver a presentarse para el cargo en las elecciones de 2018, pero ahora ambos se enfrentan a grandes problemas.