Los ojos, la ventana del cuerpo

Muchas enfermedades pueden ser diagnosticadas por lo que pasa en los ojos

Esta semana el grupo de mujeres profesionales latinoamericanas, que están trabajando en pro de la comunidad, y especialmente en la creación de espacios para atraer, empoderar y motivar a las mujeres a crecer en sus negocios, ampliar su red y creer en sí mismas, nos trae un informe sobre la salud especial para La portada Canadá, muy interesante, en el que los ojos se convierten en el instrumento para diagnosticar muchas enfermedades, por la relación que existe con el sistema ocular y el resto del cuerpo.

Informe especial de Hispanic Women's Network, Canada

TORONTO.- Los ojos sin duda son uno de los órganos más importantes del cuerpo, son quienes nos conectan con el mundo exterior y además expresan lo que está ocurriendo en nuestro interior.

Los ojos pueden reflejar las emociones de una manera más auténtica y fidedigna que el mismo lenguaje hablado o corporal, y lo más impresionante es que puede convertirse en el espejo donde observamos signos de enfermedades que no son propias de la visión, demostrando la intrínseca relación que tienen los ojos con el resto del cuerpo.

De esta manera, patologías cardiovasculares como la hipertensión arterial y endocrina como la diabetes, afectan los vasos sanguíneos de la retina produciendo alteraciones anatómicas que perjudican el normal funcionamiento de la visión y que en algunos casos puede llevar a la ceguera. Pero lo más impactante de esto, es que el ojo resulta ser una potente herramienta para pronosticar el estado general del cuerpo ya que los vasos sanguíneos retinianos son un fiel reflejo de cómo se hallan el resto de los vasos sanguíneos de órganos principales como el corazón, el cerebro y los riñones, entre otros.

Curiosamente las enfermedades inmunológicas como el lupus y la artritis reumatoide pueden ser diagnosticadas por la presencia de inflamaciones intraoculares; así como la enfermedad de Graves (patología tiroidea) que desarrolla una típica mirada asustada por la hipertrofia de los músculos extraoculares haciendo de esta manifestación, un signo patognomónico que confirma la presencia de esta enfermedad.

Considerando que el nervio óptico es una extensión del cerebro, es fácil entender que una condición neurológica como la esclerosis múltiple afecte la visión; de hecho, frecuentemente debuta con inflamaciones del nervio óptico conocidas como neuritis óptica.

No menos interesante pude sonar el hecho de que los niveles altos de colesterol se relacionan con manchas blanquecinas en los parpados, llamados xantelasmas; o que el diagnóstico del síndrome de Marfan (una enfermedad del tejido conectivo) se revela fácilmente por la presencia de la sublujacion del cristalino (lente intraocular), o que la enfermedad de Wilson (degeneración hepatocelular) puede ser detectada por la aparición de un anillo verdoso en la córnea. Es decir, un sin número de alteraciones orgánicas manifiestan su presencia a través del ojo, quién con su perfección y su magnificencia, nos da esa ventana que nos permite entrar, ver y entender lo que está ocurriendo en el cuerpo.